8/22/2016
0

CORDILLERA CENTRAL (Rep. Dominicana).-Este mundo –o mejor dicho este fin de mundo–; este país donde la aurora tiene geranios en las manos y que mira de cerca la luz de las estrellas; este país aparte de niños sin escuela y gente que muere en los caminos sin atención médica; esta república inasequible, sin gobierno, sin dolientes, envuelta en la magia de la brisa y hechizada por la terca neblina de diciembre; este universo escrito en ningún libro, donde el tiempo se detuvo, y una mujer llamada Gela dice que cree en el futuro y lucha cada día por hacerlo llegar… se llama El Gramazo y está olvidado a 1,100 metros de altura sobre el nivel del mar, en la zona montañosa de Padre Las Casas.

“Aquí vivimos cada día con la impresión de que no le importamos a nadie, empezando por los gobiernos”, lamenta Gela Delgado Peña, una mujer con las manos duras de empuñar el machete y con callos en la espera.
Este paraíso perdido en medio de la nada guarda 89 casas, ranchos que desdicen los alardes de modernidad de todo un siglo. 

No tiene acueducto; ni caminos suficientes para llegar, sacar las cosechas y trasladar los enfermos; no tiene atención médica, y en cada tramo está el recuerdo de alguien que murió en la soledad de estos senderos cuando era llevado –en parihuela, a caballo o en motocicleta– al hospital de Constanza, el pueblo más cercano en muchos kilómetros a la redonda.

0 comentarios:

Publicar un comentario

hola

CNN EN ESPAÑOL