Pero un equipo internacional dirigido por Carlos Enrich, de la Universidad de Barcelona, le apunta ahora también como un probable responsable de las metástasis, las réplicasde un tumor en otros órganos que suelen matar a los pacientes de cáncer.
En modelos celulares del cáncer humano, los científicos demuestran que el colesterol malo (LDL, o lipoproteínas de baja densidad) estimula a las células cancerosas a moverse y diseminarse.
A la inversa, el colesterol bueno (HDL, o lipoproteínas de alta densidad) se opone a esos mismos mecanismos moleculares.
El trabajo indica una nueva estrategia contra la metástasis, el verdadero verdugo de las personas con cáncer.
“La metástasis es uno de los grandes asuntos que hacen el cáncer tan difícil de tratar”,